No se que idea tenéis de Brasil quienes aún no lo conozcáis. La mía, tengo que reconocer, estaba llena de tópicos y de ideas preconcebidas, las cuales suelo criticar, pero de las que me cuesta desprenderme como a todo hijo de vecino…Pues bien, después de un par de semanas en este increíble país, vi, olí, sentí, comí y aprendí un montón de cosas nuevas, y entiendo, un poco más, que ocurre en esta parte del mundo, donde la vida y la muerte están tan presentes, donde la alegría y la tristeza caminan juntas por las calles de Bahía, donde la comida es tan “exuberantemente-abundante” como lo es la propia naturaleza, sus plantas, sus insectos, sus pájaros, o incluso como lo son sus gentes, sus ciudades, sus edificios … Sao Paolo es la mayor explosión de vida urbana que ví nunca , Río es…un auténtico “lío” lleno de energías de todos los colores , y Bahía “negra y cansada” esta como a la espera de que alguien la mime…Y luego Parati, solo por ella, por ellas y, en especial, por ti, mereció la pena este largo, rico y cansado viaje…
Comparto tu entusiasmo brasileiro!. Mi relación con Brasil, nace hace cinco años, cuándo conocí a Marceli y a Julianne, dos chicas de Pernambuco, durante una corta estancia en Francia.
En diciembre del 2006, viajé por fin, a ver a Marceli a Brasil, visité Salvador de Bahía y el estado de Pernambuco: Recife, Porto de Galinhas, Maracaipe... y quedé fascinada.
El país es una maravilla, no hace falta hablar del maravilloso clima que poseen o de la música que te acompaña día y noche...para mi el mayor descubrimiento fue la gastronomía...lo "experimenté" todo... carnes, pescados, frutas, verduras, tubérculos... poseen una riqueza increible de sabores, olores, texturas... En Brasil todo es una mezcla atrevida y su gastronomía no se queda atrás. Animo a todo aquel que tenga curiosidad por conocer Brasil a que se lance a viajar hasta allí, obtendrá a cambio unos recuerdos llenos de luz, color y energía!
Publicado por: BMZ | enero 31, 2007 en 12:55 p.m.